El Ultrasonido para adelgazar o cavitación ultrasónica, es una novedosa técnica; E l ultrasonido para adelgazar es diferente a otros tipos de técnicas, ya que no necesitarías permanecer algún periodo de recuperación en reposo, además te permite que sigas con tus actividades diarias normalmente. Esta técnica se basa en un tratamiento que se hace con un aparato para hacer ultrasonidos, el cual funciona para eliminar la grasa por medio de ondas vibratorias de diferentes repeticiones que se transmiten a través del aire. Debido al calor que produce dicho aparato, se destrozan las membranas de los adipocitos, convirtiendo a la misma vez la grasa sólida en liquida, la cual es llevada al torrente circulatorio.
Este tratamiento está especialmente indicado para los tratamientos de flaccidez en papada.
Se aplican geles transmisores específicos y se aplica sobre ellos el ultrasonido (que no produce ninguna sensación molesta), actuando a nivel circulatorio mejorando la vascularización, colaborando con la ruptura de estructuras del tejido adiposo, lo cual favorece la modelación de la zona, la calidad y aspecto de la piel absorbiendo y drenando edemas, con efectos analgésicos y antiinflamatorios.
• Sirve para tonificar la piel.
• Elimina la grasa y disminuye la celulitis.
• Ayuda a disminuir centímetros en la cintura, el abdomen y glúteos.
• Mejora la elasticidad de la piel.
• Secuelas de acné.
• El ultrasonido para adelgazar es de gran beneficio para reestructurar algunas partes del cuerpo, tales como los brazos, glúteos, abdomen y muslos. Es importante destacar que las sesiones de ultrasonido para adelgazar tardan un tiempo de 30 minutos o una hora.
• Es necesario que conozcas que el ultrasonido para adelgazar además de eliminar las grasas, este ayuda a producir nuevo colágeno y fibras elásticas, gracias al calentamiento de la piel.
• Personas con marcapasos o con cardiopatías.
• Cáncer.
• En el caso de embarazo, no se puede aplicar en el abdomen y para ser usado en otras áreas se debe preguntar antes a tu doctor.
• En personas que tengan infecciones, tromboflebitis y várices.
• Trastornos de la sensibilidad.
• No se debe aplicar sobreheridas abiertas, corazón, implantes metálicos, placas epifisarias.
• No se debe usar en zonas isquémicas, globos oculares, cerca de los oídos, testículos y cerebro.
• Inflamaciones agudas y tumores.